‘Fuera,
a pesar de acciones como el intento de utilizar la llamada Marca España, la
percepción existente sobre nuestro país no es buena.’
‘C de España’, página 274.
Esta es una afirmación escrita en el
libro ‘C de España’, nada más leerla surgen algunas preguntas: ¿Por qué tal
afirmación, en qué se basa, qué pruebas aporta? Vista así, se trata de una
generalización exenta de rigor, no es buena la percepción existente, de quién,
o quienes, de qué sectores, clases o estratos españoles se tiene mala
percepción y en cuales clases o sectores, de ese país, o países, y en relación
a que aspectos de España. No se muestra estudio que referencie esa afirmación, soportada
en la opinión de un libro firmado por autor extranjero. La opinión de un
individuo se generaliza y se hace extensiva a cientos de millones de personas
de allá y acá. Aunque más bien parece la formulación de un deseo político, en
línea de aquella idea de ‘cuanto peor, mejor’, o se convierte en una
consigna. También puede tratarse de la expresión de un cierto complejo de
inferioridad. O simplemente se trataría de una idea equivocada formulada con
poco rigor.
Una vez más debemos prestar atención a
lo que dicen los autores, las ideas son importantes, interactúan con la
realidad afectándola de una u otra forma por lo que no deben menospreciarse
cuando se lanzan, porque construyen realidad, crean ideología y actúan en
política, máxime si se tiene la posibilidad de difundirlas con total libertad
desde el profesorado u organismos públicos. Realmente, que nos miran mal, o
hablan mal de nosotros, es una idea habitual difundida por algunos
sectores, como el independentismo, que torticeramente asimila franquismo y democracia
española para forzar la mirada negativa del otro, crean una imagen
distorsionada o falsa del enemigo con la intención de desprestigiarlo más
fácilmente, al tiempo el contraste negativo es utilizado para facilitar su
desprecio y dotar de mayor fuerza su identidad colectiva. Por ello merece la
pena criticar esa postura. Echar otra mirada.
El Real Instituto Elcano, además de
informes sobre diversidad de temas actuales realiza proyecciones y entre otras
tareas, trabaja para medir la presencia global o proyección exterior de España
y la de otros 100 países. Diferencian la presencia de la influencia, diferenciando
entre presencia y poder, no correlacionándolos. Elabora un índice en el que
contempla diversos aspectos en diferentes grupos: el económico con un peso del
40% en su evaluación, en los que considera aspectos como la energía, los bienes
primarios, las manufacturas, los servicios, las inversiones; un grupo de
aspectos militares que sopesa con el 20% del total, en los que considera las
tropas y los equipamientos; y otro grupo con un peso del 40% en el que
considera aspectos culturales, tales como la cooperación al desarrollo, la
educación, ciencia, tecnología, información, cultura, deportes, turismo y
migraciones.
El número de visitas turísticas
cercanas a los 90 millones de personas puede considerarse otro dato de
percepción positivo de lo español, -entre los 3 primeros países del mundo en
recibir extranjeros-. El sol y los bajos precios, factores que habitualmente se
utilizan para justificar el turismo, no parecen explicar suficientemente la
entrada de tan alta cifra de personas, ya que sol y bajos precios los ofrecen también
otros países del mundo, y particularmente los cercanos ribereños del
Mediterráneo sin obtener resultados similares. Así pues su llegada obedecerá a
la valoración que realicen de España, a la mirada que proyecten sobre lo
español, respecto del clima, infraestructuras y transportes, seguridad legal y
física, economía, estabilidad social y gubernamental, patrimonio artístico y
servicios culturales, servicios sanitarios, amabilidad de la población, calidad
y seguridad de comida, bebida, organización… La percepción que se tiene de
España y lo español tampoco parece mala cuando se trata de uno de los
principales idiomas del mundo elegido por extranjeros para ser estudiado en
escuelas y universidades.
A continuación, se muestran algunas otras
visiones sobre España procedentes del exterior, de fuera del país, elaboradas
por instituciones internacionales, y/o reputados intelectuales, que, parecen
tener otra percepción sobre España distinta a la de los autores de ‘C de
España’. Desarrollando otras miradas sobre la sociedad española, permiten
elevar el concepto que algunos tienen sobre lo español.
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