lunes, 31 de julio de 2017
martes, 25 de julio de 2017
Cataluña. Uno de los territorios más ricos de España y de Europa
Sin estado propio, Cataluña creció y mucho, dentro y junto con España,
hasta convertirse en una de las regiones más ricas del planeta, y con mayores
índices de bienestar, libertad e igualdad, fraternidad y justicia del mundo.
Suena un poco absoluto pero a veces se nos olvida que unos pocos países del
planeta, la Unión Europea, son los únicos que disponen de un estado de
bienestar, con democracias consolidadas y derechos iguales para hombres y
mujeres. Entre esos países, España y dentro Cataluña. Según los argumentarios soberanistas,
Cataluña es un islote de desarrollo económico y social, los mismos que presumen
de ello, acusan de colonialistas a los españoles, lo cual conlleva acusación de
explotación y robo, sacar las riquezas de allí y llevarlas a otra parte ¿A
dónde, a Extremadura, Andalucía, las Castillas, Galicia…? tamaño desatino se
intenta solventar aquí respondiendo con datos estadísticos, y recordando que en
Catalunya; todos los puestos de dirección y mando político, gubernamental y
parlamentario, ejecutivo y legislativo, están en manos catalanas, al igual que
el poder económico, la dirección, control y propiedad de capital y empresas,
industrias y comercios, asimismo la representación y liderazgo de instituciones
sociales, culturales, deportivas, artísticas, etc. etc. están en manos
catalanas, ellos controlan sus riquezas y símbolos, lo cual precisamente es una
de las razones de que el proceso de secesión haya calado tan amplia y
rápidamente; de repente los criterios definidores de colonia quedan
completamente volteados del revés para arrojarlos como insultos a los
españoles, este fraude a la elemental racionalidad, se extiende sin encontrar
oposición.
economistes.assemblea.cat
España
está arrastrando Cataluña a la decadencia económica.
CCN. Círculo Catalán de Negocios
Los soportes sobre los que se apoya la reivindicación
de independencia son fundamentalmente dos: uno, es la cuestión de identidad,
que tiene la lengua como principal aspecto y otro, es la cuestión económica. La
historia económica de Cataluña de los últimos cien años, ha dado como resultado
uno de los territorios más ricos de España y Europa, que es como decir del
mundo. Este aspecto no deja de ser resaltado por quienes defienden la
independencia inmediata, y esto, tanto en estudios serios como en los argumentarios
propagandísticos que se utilizan para la agitación secesionista. La discusión
por consiguiente no se establece en el terreno de la negación de los datos,
sino en interpretaciones relacionadas con ellos y en las conclusiones que se
derivan de los mismos.
‘’Esto
nos conduce, de nuevo, al método estadístico. Sin su empleo el historiador se
halla privado del mejor útil de trabajo, como el gobernante no puede prescindir
de las cifras que le suministran los servicios de estadística. Si aun
conociendo la realidad viva de un país es imprescindible sumergirse en el mar
de datos de los anuarios para percatarse de lo que jamás se da en la pluma de
los intelectuales, es decir, la posibilidad de medir el pulso exacto de aquel a
través de cifras de población, producción, riqueza, cultura, sanidad, trabajo,
etc. de mucha mayor utilidad será plantear de nuevo estas cifras en el caso del
examen de sociedades que fueron. ’’
Jaime Vicens Vives. Aproximación a la historia de España. Prólogo
1960
En cuanto a
las argumentaciones económicas sorprenden muchas posturas, tanto de los
catalanistas cuanto de individuos que desde otras aceras ideológicas apoyan o
asoman simpatías por la independencia. Las razones que exponen sin rubor son en
gran parte contradictorias, veamos: Reconocen por un lado su extraordinaria
situación comparada con el resto de España, al mismo tiempo que mantienen una
queja victimista como colonia explotada, o una cosa u otra, las dos se oponen,
las colonias históricamente conocidas no mostraban mejores condiciones de vida
y acumulación de riquezas que la metrópoli. España
arrastra a Cataluña a la decadencia, dice en el CCN y múltiples lugares –la
agitación y propaganda funciona bien y diversificada-, al tiempo en otras
páginas enseñan un panel de maravillas comparativas con otros estados,
imposibles de haberse producido en un marco de colonización. Quizás sea al
revés, los éxitos han sido logrados porque existió un entorno y políticas
favorables, sostenidas en el tiempo, incomprensibles de explicar sin
intervención del Estado.
Una mejor posición exportadora y tecnológica que el
resto les sirve para razonar que facilita la separación actualmente, porque ya
no necesitan a España, que es tanto como decir que antaño estaban juntos porque
el mercado español les era imprescindible para su mantenimiento, lo cual sería
contradictorio que mantener que les explotaban. Una mayor capacidad generadora
de impuestos, tiene que ver con su mayor riqueza, y asentamiento de grandes
corporaciones, les lleva a decir que no tendrían que pagarlos para así vivir
mejor que el resto, y a mucha gente a aceptarlo como más democrático. Dicen que no tendrían la crisis actual si no
pagaran tanto al Estado, obviando que su actual deuda en gran parte está
causada por la reducción de ingresos fiscales, como la de todos, por la evasión
fiscal de los ricos que abandonan la obligación de contribuir. Los déficits se
reducirían aumentando la pequeñísima presión fiscal, la más baja de Europa, y
por combatir el fraude.
Cuentan glorias económicas pasadas, al tiempo que
olvidan sus déficit de población, tradicionales desde el siglo XV, que les hace
soportar gran parte de su desarrollo en población inmigrante, ocurrió en su
expansión Mediterránea apoyada en los castellanos como fuerza de trabajo,
guerrera y de ocupación, al igual que su desarrollo franquista que necesitó de grandes migraciones de
españoles, que hoy suponen gran parte de la población catalana. En Madrid los
migrantes españoles superan el 60%, tradicionalmente integrados sin que nadie
conozca, ni pregunte procedencia, en cargos civiles, militares, políticos,
culturales, deportivos, artísticos, etc. ¿No es gracioso? Agravios económicos que llevan al empobrecimiento de Cataluña, que
comprometen seriamente su supervivencia, dicen por un lado, por otro, las
estadísticas sacadas por los mismos individuos, para demostrar su potencial
entre los primeros. Eso es parte del problema, no son los número uno, y están
cayendo, a pesar de mantener una situación privilegiada.
La cuestión es ¿por qué han seguido ese camino? Una
respuesta se encuentra en que el independentismo como corriente no superaba el
15%, se trataba de sumar a la opción de la independencia otras corrientes e
individuos no secesionistas, aprovechando la coyuntura de crisis económica,
política e institucional, sumada al tricentenario de 2014 como factor de
movilización del catalanismo, fuera o no favorable a la independencia.
Mezclando opciones y argumentos era posible aglutinar más gente, daba igual la
opinión que tuvieran o sus motivaciones, el objetivo es lograr la
independencia, se abrió una brecha de oportunidad y había que aprovechar, era
imprescindible sumar toda la diversidad existente. Hablar del enorme desarrollo
de Cataluña al tiempo de decir que precisamente
por ello podemos y queremos irnos, los hace aparecer como egoístas y
aprovechados, uno podría pensar, hasta aquí sí porque nos necesitaban y ahora
ya no, pero esa única opción dejaba fuera de lugar la retahíla de quejas
antiguas.
Las contradicciones anteriores y otras, hacen visible
la disparidad de proyectos e ideas en el entorno independentista, la falta de
un proyecto común de sociedad en positivo, salvo en la secesión, el asunto
supremo es separarse, ¿para construir qué? Un país nuevo, pero ¿parecido a
cuál? ¿Con qué diferentes leyes y derechos? ¿La nueva constitución reconocerá
el derecho a la secesión que reclaman, Tarragona o Barcelona si quieren
separarse del nuevo estado lo harán? , etc. CiU y ERC no tienen proyectos de
sociedad similares, menos la maraña de grupos e intereses que hay detrás de la
independencia, que no solo son los independentistas, no importa, todo cabe en
la agitación y propaganda, separarse es lo fundamental aunque, sea con un 50% de participación y un 55% de
afirmación lo que nos lleva a una minoría social que tomaría la decisión
irreversible, mas tarde ya verán cómo unirse, con qué leyes y alternativas
concretas, por eso la mayoría de la agitación es vaga y genérica, contra la explotación colonial, contra el
expolio fiscal… y por eso necesitan marcar un enemigo externo que una lo
interno,… quizás luego reduzcan los impuestos a los ricos, al fin y al cabo es
la filosofía subyacente.
Utilizar la antigua argumentación de patria colonizada
era poco rentable, se hizo en el pasado sin buenos resultados para sumar
suficientes adeptos, porque los datos que se podían oponer eran demasiados.
Sumar gente no independentista a la independencia era difícil sin decir que lo suyo, sus problemas de paro y crisis de
bienestar, se resolverían con la independencia, solo quedaba mostrar que
las posibilidades de conseguirlo estaban al alcance de la mano, movilizar los
descontentos por la crisis y la corrupción catalanista, por las políticas de la
Generalitat y el retroceso de la democracia participativa, era posible con un
programa populista que ilusionara e hiciera verosímil cualquier ilusión, había
que unir el victimismo y el complejo de superioridad, que contuviera lo uno y
lo otro, al mismo tiempo, había que decir que hubo colonialismo y un enorme y
potente desarrollo capaz de resistir la comparación como país independiente con
cualquier otro país del mundo. El vacío y el silencio al otro lado facilitan la
implantación de ideas tan diversas.
La población catalana disfruta en comparación con el
resto de españoles, de mejores resultados económicos, tales como PIB, o
similar, Valor añadido Bruto, Rentas, bruta y disponible, empleo, tecnología,
I+D+i, educación y sanidad, dotaciones de capital físico y humano,
infraestructuras, desarrollo industrial, comercio, cuota de exportaciones, etc.
a pesar de la propaganda secesionista.
Hoy se han sobrepasado
los límites que el país puede soportar, en los ámbitos político, cultural,
social y financiero. Los agravios económicos han llevado el progresivo
empobrecimiento de los catalanes y comprometen seriamente la supervivencia del
país.
Asamblea Nacional
Catalana
sábado, 22 de julio de 2017
Otra visión de un andaluz sobre lo que pasa en Cataluña
Antonio
Muñoz Molina narra en ‘Todo lo que era
sólido’, Seix Barral, 2013, la experiencia directa de su detención y
encierro en la D.G.S. en 1974, motivada por las luchas en contra de la
ejecución de Puig Antich, en los estertores del franquismo, aquellas
movilizaciones de Granada, Madrid y toda España habían desaparecido. Cuenta la
extraña sensación que le produjo ver la película que se hizo sobre ello en el
2006, un ejemplo de la manipulación a la que someten los hechos los
nacionalistas, resulta útil para pensar como se hizo en el pasado, más allá de
nuestra memoria, y esclarecedor de cómo se fabrican las identidades.
‘Las únicas protestas que aparecían pasaban en
Cataluña. Las víctimas, los buenos, eran catalanes y hablaban en catalán. Los
policías, los militares, los ejecutores, hablaban en español. No era una
historia de fascismo y antifascismo,
sino de españoles contra catalanes. O más exactamente: ser español y ser fascista
era tan congénito como ser catalán y estar limpio de complicidad con la
dictadura. Nadie que no fuera ostensiblemente catalán mostraba la menor
humanidad…Los manifestantes que gritábamos y corríamos en Madrid perseguidos
por los caballos y vigilados por los helicópteros de la policía no habíamos
existido…Los carceleros, los policías que interrogaban y torturaban a Puig
Antich, tenían en la película un acento andaluz de caricatura.’…
‘Primero se hizo compatible ser de izquierdas y ser
nacionalista. Después se hizo obligatorio. A continuación declararse no
nacionalista se convirtió en la prueba de que uno era de derechas. Y en el
gradual abaratamiento y envilecimiento de las palabras bastó sugerir
educadamente alguna objeción al nacionalismo ya hegemónico para que a uno lo
llamaran facha o fascista.’
Antonio Muñoz Molina,
‘Todo lo que era sólido’. Seix Barral. 2013.
martes, 18 de julio de 2017
Charnegos secesionistas (3). Síndrome de Estocolmo
El problema no es ser
independentista, el problema es tomar postura usando argumentación con alta
dosis de postverdad. La crítica a errores, mentiras y medias verdades, será necesaria ya que nunca podrá llegarse a acuerdos duraderos, sin poner cada
cosa en su sitio prescindiendo de tanto simplismo. La racionalidad es un
factor esencial de progreso, el trumpismo, la postverdad, lo es de regresión. -Los
párrafos referenciados son literales del artículo citado en post anteriores ‘Cataluña en las conciencias’-.
El cuadro forma parte de la publicidad independentista para mostrar su fortaleza
su aportación
al PIB nacional es superior a lo que recibe.
Si a cada cual le dieran lo mismo que aporta, no existiría el estado de bienestar, adios gobiernos de progreso. A cada cual lo mismo que aporta es la tesis central del neoliberalismo, mis impuestos para mi, o mejor para simplificar, sin impuestos, la idea nuclear neoliberal se basa en considerar mi dinero es mio que no me lo quite el estado, y si tuviera que pagar que me lo devuelvan en especie en mi calle, en mi puerta.
Más allá del error/lio que se hace
el autor sobre la mención a la aportación al PIB nacional, superior a lo que recibe, el asunto de las balanzas fiscales, si es que se refiere a eso, merece capítulo
aparte, por su complejidad específica; recuerden que entre las relaciones
económicas de un territorio con otros, las balanzas fiscales solo son un
aspecto, las relaciones comerciales son otro factor que deriva riqueza de uno a
otro lado.
El párrafo que sigue lo escribí en
el apartado Cataluña. Una región rica se construye
en la España de Franco,
que aporta información estadística sobre lo que aquí se mantiene.
Arturo
López Muñoz, -Juan Muñoz, Santiago Roldán y José L. García Delgado- fue un
seudónimo de análisis económico, muy influyente en la progresía de los 60 y 70,
editaron diversos libros y escribieron habitualmente en Triunfo y Cuadernos
para el Diálogo, en uno de aquellos artículos publicado en Triunfo, num. 297,
en 1968 escriben: ‘El aparato productivo catalán funciona sobre la base de colocar
en el resto de la Península gran parte de los productos que no son consumidos
en la región. La Balanza Comercial presenta un amplio superávit para Cataluña…
produciéndose de esta forma una diferencia crediticia a favor de la comunidad
catalana. Por otra parte el aspecto cualitativo de estas relaciones comerciales
le es aún mucho más favorable. Las exportaciones catalanas están casi en su
totalidad constituidas por productos industriales elaborados mientras que sus
importaciones se reducen a productos de origen agrario o primeras materias
necesarias a la industria transformadora de la región… Son las ya clásicas y
conocidas relaciones que se producen entre zonas desarrolladas y
subdesarrolladas.’ En 1968, treinta años
después de la guerra, unos vivían mejor que otros, el franquismo no había
destrozado a los catalanes, ni reprimido más que a otros españoles, los había
favorecido, los expertos distinguían nítidamente cuales eran las zonas
desarrolladas, entre las cuales estaba Cataluña, y las subdesarrolladas, casi
todas las demás.
Con una cierta
lógica si no estuviera, como está, basada en el abuso.
La idea básica que tomo de la
referencia anterior es la de una pretendida lógica
de abuso afirmando que los servicios están en mucho peor
estado que los demás. La realidad es otra distinta como se comprueba
comparando datos y territorios. Sin olvidar en la comparación las constantes
referencias del independentismo en la primera fase de su campaña de agit-prop
en las que hacía valer su superioridad respecto al resto lo cual pone en
entredicho la afirmación del abuso.
La cuestión que defiende el autor y
quienes compartieron el artículo es que España ha abusado de Cataluña. En el
cuadro que publico sobre la situación relativa de las CCAA según PIB per cápita
durante el largo plazo 1955-2004 resulta difícil pensar que la mitad de
territorios de dicha tabla hayan explotado/abusado de los catalanes, los cuales
figuran en el grupo de cabeza con País Vasco, Navarra, Madrid, La Rioja,
Baleares y Aragón. Lo que indica el cuadro es que algunas distancias entre CCAA
se redujeron en el largo plazo, pero los puestos de cabeza y cola se mantienen
con pocas variaciones. Con la salvedad de la caída sin recuperación de Cantabria
y Asturias.
‘Lecciones de economía española’ VVAA. Directores, José
L. García Delgado y Rafael Myro. Thomson, Civitas. 7ª ed. 2005
Los “servicios” de Cataluña están en mucho peor estado
que los demás.
Los cuadros que siguen proceden del
estudio que realizó CaixaGalicia aportan datos comparativos sobre cómo viven
los españoles, rentas y gastos y patrones de consumo, en distintos territorios
en los que se comprueba, una vez más, que Cataluña no se encuentra en mucho peor estado que los demás, algo
que se reflejaría en patrones de consumo y rentas si los servicios públicos
fueran de mucha peor calidad que en
el resto.
Pocos discutimos que tengan algunos
servicios en mal estado que requieran pronta solución, lo cual es muy diferente
a que, en conjunto, estén mucho peor que los demás españoles. Por ejemplo
siendo verdad que las autopistas
catalanas son de pago, las españolas no. Una realidad difícil de sostener, ¿Por
qué los manifestantes no le piden a su Gobierno que nacionalice, incluso puede
que las concesiones de esas autopistas podrían estar ya fuera de plazo. No me
parece argumento para una secesión, con esa idea cada poco tiempo tendríamos
una secesión en cada provincia. Recientemente la CUP propuso nacionalizar la
Catedral de Barcelona, no está mal, pero sería mejor, dejar de gastar dinero
anualmente construyendo la Catedral de Sagrada Familia, y más rápido, al fin y
al cabo ese dinero está en los presupuestos que ellos mismos aprobaron. Son
ejemplos de algunas cuestiones que deben ser resueltas allí responsabilizándose
sin echar balones fuera.
Por ejemplo, en Barcelona capital,
existen notorias desigualdades entre los niveles de renta que llegan a sextuplicar
los de individuos que viven en unos u otros barrios. En un estado moderno no
deberían pagar los mismos impuestos unos que otros, utilizando ese mecanismo,
junto con otros, para reducir desigualdades y mantener el estado de bienestar
que globalmente pueda llegar a toda la población. Si los impuestos que pagaran
los ricos se aplicaran a su territorio o barrio, como pretende el
neoliberalismo, sería imposible mantener un estado de bienestar tal como lo
conocemos en Europa.
Algunos ricos catalanes pagan más
impuestos que otros individuos menos pudientes, esencial en cualquier estado
moderno medianamente progresista. Cataluña es un territorio contribuyente neto
a la causa común, como lo es Madrid y Baleares, a veces Valencia, pero esos
territorios son contribuyentes netos en las balanzas fiscales porque en ellos
viven o tienen los domicilios fiscales, muchas personas ricas españolas, porque
los impuestos los pagan personas y no territorios. La pretensión del
separatismo es claramente un objetivo neoliberal, se traduce en la consigna los impuestos para quien los paga.
domingo, 16 de julio de 2017
Andaluces secesionistas catalanes. (2) Trumpismo español
I.N.E. Encuesta Anual de Estructura Salarial
junio 2011
Es la reafirmación de una identidad, antagónica de lo español y lo castellano desde el fondo de la Historia y del Medievo que se articula en el asocianismo: el vecinal, cultural o de ocio.
Algo
de lo anterior es verdad, existe un componente de antagonismo desde el fondo de
la Historia. Tan cierto como la otra parte de la misma verdad, ha existido un
componente de compatibilidad, de vida común compartida, entre catalanes y
castellanos, aragoneses, navarros, valencianos…, también desde el fondo de la
Historia. La cuestión fundamental es que nunca existió un pueblo homogéneo
catalán que actuara con los mismos intereses y objetivos como defiende el
nacionalismo, ni lo hubo español, siempre hubo catalanes en uno y otro bando, y
por supuesto progres y carcas, asesinos y pacifistas, buenos y malos, en todas
las filas. A estas alturas parece mentira que haya que recordar que no existen
los pueblos buenos y limpios de corazón sin mácula alguna y los contrarios…
Los catalanes, como los españoles no formaron
nunca un frente único común, en cada guerra hubo individuos peleando
conjuntamente con unos u otros intereses catalano-españoles, fueran la guerra
contra los franceses de 1808/1823 o la anterior guerra del Rosellón 1793/1795, ¡viva la religión, muera el pecado! Fue un
grito tan catalán como castellano.
Fue mentira la existencia de un
pueblo catalán contra lo español durante las guerras civiles catalanas de
1482/1486. O durante la guerra de sucesión entre las casas de Borbón y de
Austria –referenciada a 1704/1714 significaba el reparto europeo de poder entre
las dinastías de Borbón y Austria-, algunos catalanes apoyaron las opciones
borbónicas y otros apoyaron las opciones austriacistas, de hecho fue más complicado
ya que alianzas catalanas cambiaron de bando durante esos 10 años. Tampoco hubo
una guerra civil 1936-1939 de España contra Cataluña, los apoyos a los golpistas
fascistas, entre otros, salieron del dinero y las gentes vascas y navarras y
catalanas, de hecho en los ejércitos
franquistas hubo tropas como el tercio de requetés Nuestra Sra. de Monserrat
catalán.

Anexo 11, junio 1995. Estimación del
crecimiento del PIB por CCAA. 1994.
Papeles de Economía Española, num. 64,
1995
El nacional catolicismo y el
tradicionalismo carlista también existió en Cataluña, y claro está, la
burguesía industrial y comercial, grandes propietarios de tierra, y medianos
industriales, pequeños agricultores, artesanos… como es natural, todos ellos
con intereses diferentes y opciones políticas e ideológicas distintas. Carcas,
nacionalcatólicos y fachas hubo bastantes en Bilbao y Barcelona, y las filas
del nacionalismo en democracia se nutren de muchos de ellos.
Sin duda intelectuales y sectores nacionalistas
catalanes mostraron un componente xenófobo que integra parte de la ideología
catalanista, destierren la idea de que solo hubo progresistas que lucharan
contra la carcunda española. Actualmente con el paso de los días el odio
racista a lo español, a lo andaluz en particular, inoculado por algunos
sectores durante años ha ido saliendo, sorpresivamente la emigración, los otros
catalanes, ha desaparecido del escenario salvo papeles de comparsas y Tios Tom,
actúan como si creyeran que incorporándose al movimiento secesionista fueran a
ser aceptados, por fín, en esa maravillosa sociedad que durante años les han
estado vendiendo como superior a la española, a la suya propia.
esta realidad, que dura ya tres siglos
De qué realidad escriben? la de
colaboración o la del enfrentamiento? Que llevamos varios siglos conviviendo es
tan real como que siempre y en todas partes habrá conflictos. Históricamente
los catalanes fueron poquísima población en relación al resto, tuvieron
necesidad para generar riqueza y comercio del resto de los españoles, fueran
aragoneses, valencianos, o castellanos. En su mayor esplendor dominaron algunas
zonas del Mediterráneo, de las que extrajeron riquezas, pero los marinos y
tropa que luchaban eran españoles, los catalanes recibían el dinero en su
territorio. Su desarrollo industrial de finales del XIX necesitó mano de obra
española, las primeras migraciones modernas, y necesitaron los mercados
interiores secuestrados legalmente y puestos a su disposición para vender su
textil. Nada que ver con una colonia explotada, ya que el trasvase de dinero se
realizaba desde las Españas hacía Cataluña y no al revés. Difícil aceptar ser
una colonia si las riquezas se quedaban allí, siendo propiedad de familias
catalanas y gobernadas por familias catalanas.

Madrid y Cataluña las menos pobres.'La Financiación de las Comunidades Autónomas.
Acuerdo sobre el sistema de financiación autonómica en el período 1992-1996'.
Consejo de Política Fiscal y Financiera. (20-01-1992) FIES. Suplemento 40,
Papeles Economía Española.1992.
¡Ya está bien de colonialismos!
Se han vuelto locos? De qué realidad
escriben? los andaluces y extremeños tratan a Cataluña como una colonia y se
llevan sus riquezas? Los gallegos y castellanos explotan a los catalanes? O los
cántabros y astures gobiernan y dirigen aquella sociedad? La postura que manifiestan tiene que ver con
el síndrome de Estocolmo? Por favor
dediquen unos pocos minutos a leer y comparar cifras, datos históricos, sobre
el peso de unos y otros y comprobarán que Cataluña siempre estuvo en lugares
destacados de desarrollo comparados con el resto de los citados, con la
República, con Franco y ahora durante la democracia.
viernes, 14 de julio de 2017
Andaluces secesionistas catalanes. (1) Otra fase del proceso
Leo otro texto que defiende la secesión de Cataluña, del
que tomo los sangrados referenciados. Proceden del trabajo ‘Cataluña en lasconciencias’ publicado el 9 de julio en su blog, por Lucas León Simón.
Por las redes es notorio el aumento
de posiciones independentistas fuera de su territorio, y no logro quedarme
impasible ante el humo de muchos viejos rockeros. Acepto la realidad que
describía aquella frase ‘‘hay gente pa
to’’ máxime en el mundo actual, donde es habitual encontrarse gente a favor
y en contra de montones de cuestiones, ideológicas, económicas, religiosas…
también hay gente que no se pronuncia, de los que lo hacen a favor o en contra no
será raro encontrar argumentos opuestos entre sí dentro del mismo grupo de
individuos. El odio está aumentando, era previsible, la violencia aparece
soterrada, veremos hasta cuándo.
En un problema complejo, y este lo
es mucho, aparecen múltiples posturas, incluso resulta raro ver que quienes
fueron vanguardia de la derecha española, el capitalismo catalán, carca y reaccionario,
pasen a ser embellecidos en su vertiente independentista. Todo es complicado, pero
no me hagan comulgar con ruedas de molino argumentales, la independencia no es
más progresista, ni mas de izquierdas, ni más democrático, lo que usted
defiende es nacionalismo neoliberal, secesionismo populista.
Hay independentistas de toda la
vida, con sentimientos sólidos enfrentados a otros similares, también hay
independentistas ocasionales, sobrevenidos fundamentalmente a partir de la
crisis económica que acogen argumentos para expresar sus rechazos contra la
sociedad/sistema que les golpea. Seguro que tienen razones para estar cabreados,
indignados, etc. etc. siempre me pregunto por qué no enfrentaron toda esa
movilización, por ejemplo contra la reforma laboral, seguro que hoy estaría
derribada. Se imaginan todo ese potencial movilizador en Cataluña contra sus
corruptos? Contra quienes les robaron durante años, contra quienes pusieron en
marcha por primera vez los recortes aquí? Se imaginan esas movilizaciones
contra formas de producción y contratación, contra el paro y por mejorar las
condiciones de vida? Contra las desigualdades, la precarización…?
Los llamados “convergentes” de Pujol y
Más no eran soberanistas, eran “catalanistas folclóricos”
Cada cosa a su tiempo, cada cual a
su tarea. Los secesionistas a raíz de la sentencia del Estatut, junto con la
crisis, vieron abrir la ventana de oportunidad y empezaron una nueva fase por
la independencia, pero el secesionismo no nace en esos momentos de la nada,
desde hacía muchos años en variadas formas fue masivamente desarrollado por catalanistas
nada folclóricos, por los Pujol y CiU, como muestra Antonio Robles en su
‘’Historia de la resistencia al nacionalismo en Cataluña. 1979-2006’’; ocuparon
los medios de comunicación, el poder político, el poder de los entramados
económicos, culturales, deportivos… la enseñanza, realizando enormes purgas
entre los maestros y docentes no soberanistas.
Asistimos estos días a una
descalificación, supuestamente ideológica, del proceso soberanista de Cataluña
La campaña estratégica del soberanismo
se inició mucho antes del vigente Estatut, lo que marcó la sentencia y la
crisis fue el inicio de una etapa nueva con redobladas campañas,
extraordinariamente bien realizadas, que sorpresivamente encontraron el vacío que
no les costó ocupar, si algo merece destacar es que no tuvieron ninguna
respuesta durante años, ni oficial ni oficiosamente, hasta que desde hace pocos
meses y ante el aumento de la intensidad secesionista, las respuestas
comenzaron a hacerse notar.
Los nuevos secesionistas a partir de
2011, utilizando innumerables presiones y amenazas inundaron todos los medios y
redes sociales de mentiras, y alguna verdad, comentarios racistas y argumentos
neoliberales que empezaron a ser abrazados por miles de personas, inicialmente
no nacionalistas, o eso decían ellos, la realidad es que las cuestiones y a los
individuos que defienden junto la forma de hacerlo, es claramente
independentista.
El soberanismo es, pura y simplemente,
un movimiento transversal, que afecta a la mayoría de las capas sociales,
culturales y económicas.
El movimiento es transversal, of course, como muchos otros movimientos históricos, tiene diversidad de componentes e ideologías, esa es su fuerza movilizadora, mostrar sus rechazos contra el sistema, un tercio de la población ha girado en torno a él, con votaciones cercanas a la mitad. Pero a pesar de la participación de miles de personas, los movimientos los definen algunos aspectos importantes: a) la estrategia utilizada, que en este caso, es independentista b) su dirección independentista férreamente desarrollada sobre el mismo, c) la coordinación y planificación de tareas son ejecutadas por secesionistas, d) los resultados y los objetivos proclamados también son independentistas, a pesar de participar decenas de miles de personas, los individuos que lo controlan son minorías catalanistas; Como demuestra Convivencia Cívica Catalana, familias como Vila, Serra, Solé, Vidal, Bosch, Pujol, Font, Puig, Rovira, Martí, Sala, Ferré, Roca, Esteve, Mas y Planas, apellidos presentes en el 13% de la población, pero que controlan el 40% de la representación política.
El soberanismo no es simplemente un movimiento transversal, tiene ideología cuya base sitúa al pueblo catalán como uno y homogéneo, por encima del resto, merecedor de mayores parabienes que otros, el soberanismo/independentismo tiene objetivos bien documentados, que expresa a través de una estrategia de agitación y propaganda con tres ejes fundamentales en esta etapa: 1) España nos roba, 2) desviar la responsabilidad de todo lo malo que ocurría en Cataluña hacia el enemigo externo, los españoles y 3) la campaña sobre el derecho a decidir que ponía en lugar preferente lo democrático del proceso. Ambos ejes a desarrollar tanto en el interior como en el exterior. Sus listados de argumentarios así lo recogían hace años.
Crear un enemigo externo, lo español, se ha ido aceptando casi sin oposición por todo tipo de gente, un éxito en la medida que aglutina fuerzas contra un enemigo fácil que no responde y carece de simpatías, porque además lo español se identifica con la derecha, con el PP, o el franquismo, con el fascismo. Por alguna razón han desaparecido del escenario la derechona catalana, los multimillonarios catalanes, el fascismo catalán el económico y sus grupos de la porra y balazos a los anarquistas, el franquismo catalán parece no haber existido, por el contrario nos han puesto a los españoles en el escenario y les juro que yo no robo a Cataluña, ni mis hijos, ni primos, seguro que ustedes tampoco, ni cientos de miles de andaluces ni valencianos… ni millones de castellanos o gallegos ¿Ustedes han visto manifestaciones contra los Pujol? Y contra los ladrones del Liceu? No, este no es un movimiento que luche contra la corrupción, contra el paro, contra la precarización…
Continuará...
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