Ni yo, ni yo

Vaya vueltas y revueltas al asunto, hay de todo en el mercado, lo cual ya es un gran paso adelante respecto a otros tiempos. Reconforta ver los autobuses urbanos cruzándose con la agitación de bienvenida y con la de ‘yo no te espero’, y escuchar en las teles diferentes versiones sobre la visita, que ‘si es un jefe de estado y por tanto es lógico volcarse, como con todos’, no es cierto, con todos los jefes de estado no se monta un cirio tan grande, además está la otra versión de su papel, como líder religioso, lo que no debería primar el Estado.

En ambos casos no se debería gastar tanto dinero público con tanta ampulosidad, el líder de la religión que dice representar entraba en burro o caminando entre pobres. Que si a los Rollings se los monta algo parecido, no es verdad, ni de broma se produce este embolado grandioso, en todo caso se haría con dinero privado. Los que potencian su visita son los mismos que gritan que hay que controlar el dinero público, pero ahora donde se esconden los liberales derechosos que no salen a decir que lo público debe quedar al margen.

Ni a cantantes, deportistas o jefes de Estado que vienen se les entrega tantísimo dinero como el que destina el Estado español a la Iglesia Católica. Empezando con el timo de los impuestos y la famosa X, que implica que los contribuyentes creyentes pagan menos impuestos que los no creyentes, porque lo que hacen realmente es que de lo que tienen que pagar al Estado, por ley, como todos, detraen una parte que se entrega a la Iglesia y el resto, pero solo el resto pasa a las arcas comunes. Ninguna X, para nadie en la renta.

Los hay que cuentan maravillas sobre la labor que realiza la Iglesia con los pobres, etc. para justificar todas las prebendas que reciben. Pues que dejen de hacerla y de recibir prebendas, que se corte esta diabólica relación. Que es magnífica la labor que realizan miles de personas cerca de gente necesitada, aquí y en todas partes, sin duda es una de las mejores páginas que puedan escribirse sobre el género humano. Por cierto, no son los mismos, unas personas realizan la labor de ayuda y solidaridad y otras son las que reciben las prebendas, y seguro que muchas continuarían su labor en ambos sentidos, pero al menos quedarían desenmascarados tantos jerarcas religiosos y organizaciones que viven del dinero ajeno, como siempre hicieron.

Las maravillas de la Iglesia, históricamente se cuentan también por millones de asesinatos, persecuciones, guerras, exterminios de pueblos, razas, tanto tribus de aguerridos religiosos judíos o cristianos contra los no creyentes, o contra los otros creyentes, o contra los que opinaban de otra manera, como con ejércitos de los papas arrasando ciudades y países, pasando por las familias de cardenales o papales asesinando a los probables competidores papales.

Mucha gente amparada en una bendición, es capaz de justificar matanzas sangrientas, después de una misa batallones católicos mataban mas sanguinariamente no hace tanto tiempo, hasta las SS tenían en sus hebillas aquella leyenda de ‘Dios está con nosotros’. Estas cosas forman también parte de la historia, solo que hasta hace poco a nadie se le permitía hablar de ellas. Se le mataba y punto. Luego simplemente se impedía por la fuerza y ahora es más difícil lograrlo.

Que las catedrales, monasterios, cuadros, esculturas, joyas y un largo etc. cuesta mucho mantenerlas, dicen muchas veces muchas personas, pues la mejor solución es que reviertan al pueblo de donde salieron y ya se encargará el Estado de su mantenimiento, como hasta ahora, pero al menos las cosas estarían más claras, no serían de propiedad de una organización privada o de un estado extranjero como hasta ahora.

Organización privada que vive en el secreto y sobre la que solo unos poquitos hombres deciden todo lo relativo a su poder, a su organización, a sus leyes, a sus criterios, minoría que se arroga el derecho de creerse dioses y por tanto de someter al resto de la humanidad.

Y no es broma, sigo escuchando estos días en la tele, a personas sensatas, defender a los pederastas religiosos, ‘porque son pocos, porque quien tira la primera piedra’, para defender a la Iglesia. No son pocos, en relación con la organización de la que proceden, al contrario son un porcentaje muy alto de religiosos y millones de ciudadanos tiramos la piedra, millones somos respetuosos y no cometemos atropellos tan atroces. Pero cuanta confusión siembran las supersticiones, la pederastia es un delito por el que deben pagar los que lo cometen y los que lo protegen y potencian, una sociedad laica, actual, no puede permitir que sea juzgada con criterios bíblicos, sean islámicos, cristianos o judíos.

Que verguenza con la crisis que hay, estos despilfarros, abiertamente, visibles por todos, insultando con la ostentación, pero que religión es ésta? no decía otras cosas?