miércoles, 28 de abril de 2021

Sin olvidar las elecciones en Madrid

La vida sigue, con sus amenazas variadas y la elaboración de las mas increíbles teorías conspiranoicas que se ajustan a la verdad que cada individuo quiere creer. El problema es muy serio, no tanto, o no solo, por las amenazas en sí mismas, cuanto por lo que afecta a la convivencia ciudadana en la calle, en los trabajos, en los lugares comunes donde nos mezclamos gentes diversas, en donde ya es visible un aumento generalizado de violencia verbal. 

Mientras tanto no se discute de estos dos años, no se pasa revista a lo hecho y a lo por hacer, ni siquiera se menciona ni debate de sanidad instalados como estamos en la mayor crisis sanitaria en cien años. A continuación un post que publiqué el 9-3-2011, y creo sigue siendo válido para explicar como actúa el PP en Madrid y comprender mejor que pasó durante la pandemia y el futuro que espera si ganan otra vez los mismos, que es lo que apuntan todas las encuestas.


El negocio de la privatización sanitaria, emprendido por la Comunidad de Madrid gestionada por el PP, consiste en traspasar grandes cantidades de fondos públicos a las empresas privadas. Se realiza en la sanidad madrileña concediendo derechos de gestión de los hospitales nuevos que se construyen a las grandes constructoras durante 30 años, comprometiendo pagos por alquiler de servicios hospitalarios durante ellos, que asegura a las empresas el mantenimiento del negocio tanto el sanitario como el colateral de servicios que genera, con un público fijo, la población madrileña convertida en cliente cautivo.

El negocio para las grandes empresas consiste en construir el hospital, que se cobra mediante aportaciones dinerarias de la Comunidad susceptibles de amortizar la inversión realizada en el menor tiempo posible, podría ser en 5 años. ¡Negocio redondo y seguro! En 3 años ya han amortizado casi el 70% de la misma. Y encima los nuevos hospitales son más caros, su coste por cama casi dobla el de los hospitales públicos.

‘’Los hospitales concertados, más caros. ELENA G. SEVILLANO - Madrid - 22/02/2011’’ El coste por cama de centros 'semiprivados' como la Jiménez Díaz casi dobla el de públicos como el Clínico - Una sola empresa gestiona ya mil camas.

Los fondos que se destinan a los pagos hospitalarios saldrán de los presupuestos de la Comunidad, del dinero público, que adelgazarán otras partidas de gastos sanitarios, contrataciones médicas y auxiliares, personal de gestión, etc. De esta forma el resultado se traducirá en mayor número de hospitales, pero menos médicos en activo, mayor gasto por individuo en la sanidad, que para hacer rentable la parte privada del negocio desviará los enfermos ‘más caros’ a la zona pública. Si alguien piensa que esto es complicado, se equivoca, se está haciendo con gran facilidad ante nuestras narices.

Comprendo que muchas veces cuando hablamos de privatización de la sanidad es difícil entender lo que está ocurriendo, si resulta que vamos al médico y nos siguen atendiendo, que es lo que importa. Pero claro eso tiene un coste y nos solemos olvidar de ello. Un coste que pagamos todos con nuestros impuestos, si el coste sube, o pagamos más, o nos dan menos servicio, así que los costes de la atención sanitaria son tan importantes para nosotros como la misma sanidad, porque forman parte de idéntico problema y servicio.

Por tanto, los costes y la desviación de los mismos serán provocada por una gestión que promueva satisfacer intereses privados, y ello sucederá porque las grandes empresas hagan negocios con la sanidad con el objetivo de aumentar su lucro, esos mayores costes, nos interesan sobremanera porque los pagamos nosotros y al final repercutirán en que la sanidad gestionada nos saldrá más cara e irá desapareciendo bajo nuestros pies poco a poco. Así que está bien que comprendamos lo que significa esa historia de la privatización de lo público, ahora que se acercan las elecciones, porque los políticos que son los que gestionan estos asuntos desde la Comunidad de Madrid, tienen ideas diferentes. No todos piensan igual.

El dinero gastado en ‘alquileres’ de 8 hospitales, durante los últimos 5 años, 580 millones, habría sido suficiente para construir 7 hospitales públicos, ahorrando 25 años de alquileres. Si alguien está interesado en comprender este lucrativo negocio para grandes empresas y ruinoso para los pacientes de la sanidad pública, puede mirar el sistema sanitario del Reino Unido, modelo en este sentido. Y recibir mayor información en los dos enlaces siguientes:

El 9 de septiembre del 2009, lo denunciaban en el blog, 'Ventanas del Falcón',
En la magnífica página de la Coordinadora Anti Privatización de la Sanidad de Madrid (CAS), disponen de amplia y valiosa documentación sobre el tema sanitario.
Mi salud no es un negocio. Es otra buena fuente de información sobre el asunto.
Apuntes para la reflexión sanitaria , otra buena página de sanidad en general.

sábado, 24 de abril de 2021

La sociedad está enferma. La fascistización crece.

 Vivimos en una sociedad plagada de enfermos, personas que disculpan, incluso aplauden la violencia, la de sus equipos, la de sus correligionarios, la de sus cabrones.

Siempre han existido psicópatas, y violentos, los que enredan porque no saben hacer otra cosa. El problema ahora es que se ven mucho más que antes, las redes sociales han elevado a categoría, lo que antes podía ser anécdota, han agravado el problema social extendiendo un clima de violencia que está haciendo insoportable la convivencia.

Hoy toca hablar sobre las últimas manifestaciones de violencia, las amenazas de muerte a personal del gobierno utilizando mensajes y munición de rifles de asalto, fácilmente conseguible en las inmediaciones militares. El mismo día, o al siguiente, se empieza a difundir por algunas personas la teoría de que se trata de un montaje, las pruebas no se aportan, como es costumbre.

Para considerar que las amenazas fueran reales, se aportan pruebas como los mensajes escritos, las balas, los sobres, matasellos, recibidos por los tres amenazados. Y las denuncias efectuadas a la policía, para que investigue y proteja. Las pruebas se sustentan además en el pasado reciente. El miedo de esas personas al daño hacia sus familias, se basa en amenazas anteriores, manifestaciones de grupos de militares afirmando querer matar a millones de españoles, apoyadas, o comprendidas por VOX. Amenazas en las redes sociales, amenazas en los parlamentos…

La cuestión planteada puede tener varios aspectos a considerar: Uno de ellos es el de la veracidad o no de las amenazas en concreto difundidas ahora. Otro el de considerar deleznable ese tipo de amenazas, fueran realizadas por unos u otros y el de la parafernalia de justificaciones y comentarios en torno a las mismas pretendiendo justificarlas porque aquellos otros dijeron en su día…

Verdad o mentira, la experiencia española es rica en estas historias. ETA y su entorno, hacían cosas muy parecidas, amenazaba de forma similar y su entorno trataba de justificarlo con apelaciones de todo tipo. El independentismo catalán actúa de forma similar, -con menos muertos que ETA- amenaza, pone en la diana, y ataca a todo disidente molesto, con un corro de justificadores, ambos quieren expulsar del territorio a sus enemigos. Ambos casos condenables, sin más. No se equivoquen condenar no es decir luego de una frase de condeno, pero…, porque eso no es condenar, es justificar lo ocurrido con esa supuesta correlación con lo sucedido en otros momentos, lo cual realmente añade gasolina al fuego.

Ni la actuación de ETA, ni la del independentismo, ni la de los ultras, pueden elegirse como justificables, todas son formas similares de fascistización, ambas crean un caldo de cultivo social propicio a la violencia a la aniquilación del contrario, ambas niegan valores éticos de respeto y convivencia democrática en libertad, niegan el respeto a la diversidad, a la vida, a la libertad e igualdad a la fraternidad.

Resulta deleznable que individuos que criminalizaban los comportamientos del independentismo catalán, acepten como buenos los comportamientos actuales que justifican amenazas de muerte, y para esto, igual da que sean ciertas o falsas. Se aceptan, o no, esos comportamientos, se los quita importancia, se los ningunea o por el contrario se consideran horribles en esta sociedad democrática.

El comportamiento de los ultranacionalistas etarras, catalanes o españolistas, antes de las amenazas directas de muerte, tiene muchas similitudes, consideran que este país es suyo, les pertenece por herencia divina, y el resto de convivientes están aquí de prestado, por eso luchan por expulsarlos de su país, creen que el resto de gente si tiene cargos o puestos de relevancia son ilegítimos, se los han arrebatado porque eran de su propiedad. Criminalizan al contrario, para deshumanizarlo, lo convierten en animal, para que se les pueda hacer daño sin cargar la conciencia. Esto no tienen que hacerlo directamente los asesinos, sino usted y usted, sus amigos, aquellos que banalizan la violencia.

Lo peligroso del momento actual es que muchas personas de las que te rodean, vecinos, antiguos compañeros de trabajo, fruteros, coleguillas de barrio, compradores en las colas del mercado… muchas de esas personas están justificando amenazas de muerte, efectuadas por quien fuera, cuando para una postura ética debería ser igual, y no queda perdonado justificarlas porque sus receptores han sido, o son, o porque hicieron o dijeron tal cosa… lo peligroso del momento es que la fascistización se extiende por Madrid, como antes lo hizo por Euskadi y Cataluña, se extiende entre amplios grupos de personas, periodistas o políticos, entre intelectuales, entre jóvenes y viejos, mujeres y hombres. Y las redes sociales difunden la fascistización.

No se trata de que militantes cualificados de Vox hayan realizado directamente esas amenazas con las balas, probablemente eso no ocurrió, pero su apoyo ideológico, y su proceder mediático, difundiendo el odio dan suficiente cobertura para ese tipo de acciones a personas predispuestas a ello.

PD: Otra teoría conspiranoica.

Los sostenedores de ella, dicen que es imposible pasar en sobres unas balas, porque el scaner de correos lo detectaría. Perdonen sus titulares, pero la realidad dice otra cosa.
1) el scaner de correos en realidad no pasa todas las cartas, solo un pequeño porcentaje.
2) también puede ocurrir que haya mano cómplice allí.
3) en los puertos españoles los miles de contenedores q entran, tambien pasan en teoría una revisión por rayos. La realidad es que se hace aleatoriamente a unos cuantos.
4) las drogas, las armas, el contrabando de animales, de personas, etc. pasan habitualmente por todos los puertos a pesar de q aseguran scanean todo.
5) en los aeropuertos supuestamente todo pasa por scanner desde el 11-S, iunnumerables casos de armas siguen pasando por sus maletas.
6) la policía y guardia civil, afirman rotundamente que cartas recibidas desde correos en los ministerios, por ejemplo, también particulares, llegan con amenzas, balas y hasta artefactos eléctricos tipo explosivos.
7) y fundamental sea verdad o mentira, lo mande tal o cual, las amenazas de muerte a ministros, familiares, particulares, tipo mafia, terrorismo, u lo q sea, se condenan, o se aplauden y justifican. Si fueran mentira una vez demostrado, hacemos trizas a quien las utilizara, pero y los q mantienen desde hoy su conspiranoia, que harán si se demuestran ciertas?
No olviden tampoco, la afirmación de bancos imposibles de robar, q se roban, de arte imposible de entrar y quitar de los museos, de asesinar a presidentes, imposible por sus escoltas, de accidentes de avión, barco, tren, etc. imposibles de producir porque en todos los casos hay artilugios electrónicos que lo impiden, q lo sacanean, q lo detectan. A estas alturas del siglo XXI todavía creen esas cosas q dice la publicidad, o solo las creen los que quieren creerlas. Aquellos q les gustaría fuera así, para justificar sus miserias.

jueves, 22 de abril de 2021

De chiringuitos y subvenciones, la derecha sabe mucho

 Ayuso, y Monasterio, insisten en el asunto de las subvenciones, ‘a las colas del hambre’, a los precariados, a los desfavorecidos, y a los ‘chiringuitos’, ojo solo nombran a los de atención social. Actúan igual que los trileros, hacen aspavientos y mueven mucho una mano, para que el público dirija allí su vista y no vea el chanchullo que hace la otra mano. Los chanchullos que ha destapado la justicia, algunos ya juzgados, como Gurtell, otros en proceso judicial, la cuenta B, en todos ellos se prueban sobornos recibidos a cambio de contratos inflados pagados con dinero público, lo cual es una manera de darles subvenciones bajo cuerda, ilegales a esas empresas de amigotes que hacen las obras, que pagamos todos.

El Zendal, ¿cuánto lleva gastado? 100, 150 millones de Euros, sin control, sin ninguna cuenta presentada al parlamento madrileño. ¿Cuánto va perdido en la entidad mixta Madrid Network? Hasta ahora, localizados 20 millones de euros. Eran préstamos facilitados por el gobierno del PP, Esperanza Aguirre, a empresas zombis, cuyos avalistas y garantías presentados, no existen, no existieron. De una de esas empresas cobraba Isabel Díaz Ayuso mas de 4.000 € mensuales, además de muchos otros cargos del PP, incluido Santiago Abascal. ¿Cuántos millones facilitados por los gobiernos del PP de Madrid a empresas afines, están sin justificar?, un informe del Ministerio de Economía bajo el PP, siendo ministro Luis de Guindos, encargado a la auditora Isdefe, dice que 67, de 80 millones no están justificados.

La lista de subvenciones directas e indirectas es enorme, gran cantidad de desgravaciones fiscales, de contratos inflados en sus precios en inicio o durante su ejecución, el desvío de fondos públicos favoreciendo a grandes empresas y empresarios de postín, de los que salen diariamente en la prensa vinculados al futbol, a las constructoras, a la banca, a las exportadoras, a las energéticas, etc. primando a colegios privados y concertados religiosos, regalando suelos públicos a unos y otros, amigotes todos del PP. Y ahora también de Vox. Hace pocas semanas se publicó la noticia de que el hospital Puerta de Hierro, en Majadahonda, fue vendido por Florentino Pérez a un fondo de inversión extranjero. Un pelotazo, actual, un pelotazo de la etapa PP de Aguirre. Sí lo construimos con dinero público, quedó en manos privadas a los que el Estado paga por su uso y mantenimiento grandes sumas de dinero. Negocio privado muy rentable, tanto como para comprarlo ahora un fondo de inversión, por su alta rentabilidad. Los trapicheos de lo público a lo privado.

Estos días de campaña electoral, le dice a la Sra. Monasterio, el Sr. Hilario Alfaro, actual presidente de los empresarios madrileños, en el Foro Empresarial de Madrid ‘que las propuestas de Vox están mas centradas y mas cerca de las soluciones empresariales que las de Ayuso’. Responde la Sr. Monasterio, prometiéndole: ‘‘que Vox nunca consentirá que en los presupuestos de Madrid solo haya migajas para los empresarios’’

 ¿Chiringuitos, subvenciones? Reproduzco un post que ya publiqué hace tiempo.

Aprueban el Ingreso Mínimo Vital, y salen por todos los rincones quejas y peguitas, dicen por lo que representa de compra de votos la subvención a los más necesitados, que además se quedarán por los rincones haciendo el vago, los otros millones de individuos y empresas que reciben desde hace tiempo prebendas del Estado no hacen el vago, meten a la saca y nadie dice nada. Puedo opinar dos cositas sobre el asunto.

Comprendo el desasosiego que tienen algunas personas por las subvenciones que perciben algunos y no ellos. Pero si miramos bien, nos daremos cuenta que todos percibimos alguna ayuda. De verdad, entiendo que a veces produce cabreo ver que, en situaciones de crisis, algunos se llevan más ayudas que otros. Entiendo que es un problema económico y ético, estudiar si los más necesitados necesitan más ayudas y las condiciones concretas de disfrute y de contraprestación.

Otro aspecto diferente sobre el tema subvenciones es el de quienes las perciben, no solo los necesitados, si hay derecho a ello, como dicen algunos y por qué. Es necesario ampliar el círculo de visión de cada persona que critica y mirar más lejos, la suyas y las otras, las de unos y las de otros…Y además del concepto subvenciones, considerar los conceptos relacionados, el de exenciones, ayudas y concesiones. Realmente significa que parte del dinero público pasa al sector privado, bien porque se entrega, dinero que sale, o bien porque el Estado acepta dejarlo de percibir, dinero que tenía que entrar a las arcas estatales y no entra. O bien que el Estado regala, concede graciosamente a alguna empresa, una concesión de negocio privilegiada, por ejemplo de ondas para una emisora de televisión, en vez de venderla mediante subasta al mejor postor, con lo que entrarían ingresos a las arcas públicas.

En España existe un aluvión de subvenciones, ayudas, exenciones y concesiones; a los ricos a través de reducción de impuestos, facilitando el pago de menores impuestos relativos, y/o de menores tipos impositivos, o facilidades de liquidación de sociedades como las SICAV, creando el crédito fiscal a la banca, para que no pague durante una temporada, o entregando ayudas para reflotarla. Subvencionamos a grandes personajes, los amigotes elegidos a dedo, con puestos en grandes empresas e instituciones con sueldos fuera de lo común

Subvenciones a las empresas por docenas de circunstancias, a clínicas médicas, colegios privados, congregaciones, Iglesia Católica, ONG’s. Subvencionamos grandes empresas y autónomos, exportaciones y producción, agraria e industrial, comercio y transporte... Hay subvenciones para calderas de calefacción, electrodomésticos, aislantes térmicos, interruptores de luz por detectores de presencia, ascensores, aspectos variados de rehabilitación de casas, a ventanas aislantes, a vendedores de coches, y a sus fabricantes, a grandes corporaciones industriales para abrir una instalación, y un largo etc.

Muchas de las ayudas lo que hacen es engordar los beneficios directamente, otras ayudan a mantener altos precios y por tanto finalmente van destinadas a manos empresariales aumentando ganancias. Un ejemplo serían los precios de la electricidad que pagamos todos al mayor costo de producción posible, a pesar de que unos sistemas produzcan barato, por ejemplo, la producción eólica y solar cuesta muy poco, pero todas las empresas nos cobrarán por lo caro, por el coste alto de las centrales de petróleo, lo cual equivale a subvencionar a grandes empresas generadoras que producen más barato. También subvencionamos a las hidroeléctricas por concesiones graciosas del agua de todos los españoles regaladas hace muchos años por Franco y que siguen manteniendo en vigor, por tanto, un insumo de producción les sale gratis, pero a nosotros nos le cobran.

Subvencionamos partidos, sindicatos, patronales, patronos y empresas afines, exportadoras, amigos afines (Gürtell da una buena y variada lista, al margen de legalidad o delito), subvencionamos películas, medicamentos, alimentos, cadenas de televisión, (una concesión a una emisora en volumen de dinero es superior a miles de subvenciones), también reciben subvención fundaciones como la FAES de Aznar, y la Francisco Franco, o las otras, pues claro. Subvencionamos peajes de carretera a grandes empresas de autopistas, billetes de metro a los papistas, o transportes en general a determinadas poblaciones, gasoil de pesca, agrícola y de transporte a camiones y autobuses, subvencionamos economatos y servicios médicos, residencias vacacionales y viajes, etc. a las fuerzas de seguridad y militares. Y etc. etc. 

Antonio Gutierrez cifra en 80.000 millones de euros anuales la maraña tributaria en deducciones, desgravaciones y otros elusivos artilugios fiscales sin utilidad económica. La lista de subvenciones es tan grande que estamos perdiendo la noción de coste real de producción, si a alguien le interesa el tema debe prestarse a estudiarlo buscando por los presupuestos y por rendijas no solamente del Estado Central, también de las Autonomías, de las Diputaciones Provinciales y de los Municipios, y no fijarse solo durante las etapas de gobierno de un color sin señalar con el dedo solo aquellas dos o tres que más rabia le dan. Pero por favor no se metan con los precariados y necesitados porque reciban unas migajas para vivir.

lunes, 19 de abril de 2021

De los planes q pueden salvarnos, q poco se habla

A continuación tienen dos artículos que hablan de los planes que pueden salvarnos, a todos, los de un lado y otro. Son planes de los que apenas se discute, en todo caso solo conocerá usted frases grandilocuentes, pero muy pocos los conocen, no digo en su desarrollo, para lo cual hay que leer, no se conocen ni siquiera en sus titulares, en su apartados, pero llevan muchas horas de trabajo, de muchas personas, personal del Gobierno, del Estado, e instituciones privadas llevan meses estudiando, haciendo proyectos y presentándolos en diversas instancias, tanto nacionales como europeas. Pero solo resuena la voz de las zorrerías de MAR/Díaz, para distraer de lo esencial. Los dos artículos pueden servir de introducción al tema mas importante de estos momentos, ¿como salir de ésta e iniciar otro camino que nos pueda conducir a mejor lugar? Sin los planes estamos abocados a irnos muchos años atrás.

Infinitos proyectos, dinero limitado. Xavier Vidal Folch. 13-04-21

La incógnita se ha invertido: no dudamos si llegaremos, sino sobre en cuánto nos pasamos. Al lanzarse el plan de recuperación, la inquietud se cernía sobre si la economía española sería capaz de presentar suficientes proyectos, de buena calidad y en breve lapso de tiempo para acceder a las ayudas del Next Generation EU y programas adláteres. Hoy, las infinitas “manifestaciones de interés” de empresas y administraciones ya enviadas al Gobierno prefiguran que sus peticiones acaben desbordando ampliamente la cuantía de 72.700 millones en subvenciones europeas (ampliables hasta 83.200 millones) preasignados a España: una cantidad ingente, pero que con toda probabilidad será insuficiente para todos los demandantes.

Bastan unas muestras. Las empresas del Ibex tenían perfilados hace dos meses proyectos por un valor conjunto superior a 100.000 millones. Solo las energéticas diseñaron 400 proyectos e Industria recibía proyecciones de hasta 60.000 millones. La automoción planea invertir hasta 54.000 millones hasta 2040. La aeronáutica, 11.000 millones hasta 2026. Las constructoras, hasta 157.458 millones para 2030. Y otras cifras multimillonarias telecos, energéticas, sectores tecnológicos… Y las administraciones. Un botón: los 27 proyectos públicos y privados patrocinados por la Generalitat prevén aplicar 41.000 millones.

Claro que esa lluvia de cifras es una amalgama heterogénea e incompleta: hay protagonistas repetidos y horizontes temporales dispersos. Y además los fondos europeos solo cubrirán una porción de las inversiones: para algunos expertos, entre una tercera y una cuarta parte. Pero aun así, datos e indicios perfilan un desbordamiento de la convocatoria.

Más allá de lo cuantitativo, quizá el logro más relevante de la iniciativa pública europea, y de la convocatoria española, sea cualitativo. Al imán del apoyo público condicionado a revisar su propia estructura productiva orientándola a un futuro —ecológico, digital, social— distinto, el nivel de la respuesta empresarial —a la espera de datos oficiales, y a veces espoleada por gabinetes jurídicos y consultoras— está siendo contundente. Descontada la inevitable cuota de oportunistas, cazatalentos y funámbulos, muchas empresas (y organismos oficiales) han replanteado con seriedad sus modelos de negocio/servicio y sus planes estratégicos plurianuales. Han modulado sus vínculos con sus matrices y/o con sus filiales; han establecido nuevas alianzas intersectoriales (por ejemplo, entre industrias automotrices y energéticas). Han iniciado consorcios con el sector público y vínculos con otras compañías europeas. Han repensado su posición en el mercado, y para un mercado cambiante.

Inevitablemente, muchos de sus proyectos quedarán en el camino: o porque los hay mejores en el mismo sector, o porque son deficientes, o porque no habrá bastantes fondos. Hay que prever el rebote de frustración, y prepararse para hacerle frente. ¿Cómo? En cuanto a la financiación, los buenos proyectos viables deberían tener oportunidad, incluso aunque no fuesen los primerísimos. Una vez se agote la disposición de los subsidios quedaría el recurso a los préstamos baratísimos del Mecanismo de Estabilización o Mede (del que España podría absorber 24.000 millones de euros); los del programa InvestEU, el sucesor del Plan Juncker (que ha cofinanciado proyectos generadores de inversiones por 514.000 millones), y que aproximadamente lo repetirá hasta 2027; o, entre otros, los del Banco Europeo de Inversiones, que aún podrían multiplicarse. Eso valdría también para todos los proyectos —incluyendo de forma transitoria a los ganadores— si el episodio del bloqueo del Tribunal Constitucional alemán prolonga el retraso en la disponibilidad de los fondos Next Generation. Pero entonces quizá cabría combinarlos con un mayor endeudamiento directo de la Comisión, de forma similar al programa SURE, que respalda con 100.000 millones operaciones laborales como los ERTE.

En cuanto a la gobernanza, el rechazo de planes correctos inducirá críticas acerbas que entorpezcan el plan y tiendan a deslegitimarlo. Descartada la opción de una agencia independiente, la administración en solitario no se bastará para conjurar este peligro. Activar los foros de participación y grupos de alto nivel (previstos en el artículo 17 de la ley que regula los fondos), y su capacidad de efectuar “recomendaciones” es una opción útil. Para convencer a los segundones de que otros merecían el primer puesto. Objetivamente.

Cómo saber si España puede. Cristina Monge. 15-04-21

Enfoques a corto, medio y largo plazo; cuatro objetivos transversales; diez “políticas palanca” con sus 30 “componentes”; y 70.000 millones de euros para invertir entre 2021 y 2023 con el objetivo de modernizar la economía española, entendiendo por tal, como la Unión Europea ha definido, su digitalización y transición ecológica.

No han faltado adjetivos ni comparaciones con los grandes momentos de la Historia reciente española para definir España Puede, el plan que el Gobierno enviará a la Comisión Europea en unos días para determinar el destino de los fondos Next Generation UE, y no es para menos. La transversalidad de las políticas que abarca, la magnitud de los fondos disponibles, y sobre todo la necesidad de la que parte, no aconsejan otra cosa y obligan a hacer de éste un “Proyecto país”.

Un proyecto de país no solo pertenece al Gobierno, ni a las Administraciones Públicas, ni a las empresas o agentes sociales. Un proyecto de país es de todos estos agentes y otros más, tanto de los que tienen hoy responsabilidades en organismos públicos, privados y sociales, como de los que pueden tenerlas en el futuro.

Tanto es así que este programa, consciente de la complejidad que encierra, propone medidas a ejecutar entre 2021 y 2023, y deja deliberadamente pendiente lo restante hasta 2026. Esto, que podría considerarse un ejercicio de prudencia, resulta confuso al carecer del instrumento fundamental que le daría consistencia: la medición del impacto que estas políticas van a generar para conseguir el objetivo último, que no es otro que “avanzar hacia una España más verde, más digital, más cohesionada desde el punto de vista social y territorial, y más igualitaria”. ¿Cómo se sabrá si las políticas son las adecuadas y están surtiendo los efectos oportunos? ¿Cómo se comprobará qué políticas están siendo más eficaces, cuáles a medias y cuáles menos? Y además, ¿cómo podremos seguirlo, entenderlo y evaluarlo el conjunto de la ciudadanía? Más allá de las auditorías y controles de gasto y legalidad oportunos, nada se dice del impacto.

Esta sería una ocasión de oro para recuperar una Agencia de Evaluación de Políticas Públicas que pudiera seguir y valorar el impacto de lo implementado. Si esto no es posible, al menos sería deseable definir unos indicadores de impacto que permitieran medir el alcance de lo hecho y programar los siguientes ejercicios de acuerdo al resultado de la evaluación. Y si esto tampoco fuera viable, resultará, al menos, imprescindible, que este programa entre dentro del perímetro de acción de Cumpliendo, el proceso de rendición de cuentas que acaba de nacer y que pretende mostrar a la ciudadanía el cumplimiento de los compromisos de gobierno.

Lo que no se mide no se puede mejorar, y en este programa nos jugamos demasiado. España necesita afrontar transformaciones esenciales. Una de ellas, y no la menos importante, tiene que ver con la participación, la transparencia, la evaluación sistemática y la rendición de cuentas.

‘’España Puede’’

https://www.lamoncloa.gob.es/presidente/actividades/Paginas/2020/espana-puede.aspx

jueves, 8 de abril de 2021

Ser mas de izquierdas que Gabilondo

En Septiembre de 2012 escribí este post, entonces con referencia Felipe  González y Peces Barba, hoy lo traigo a colación referenciado a Gabilondo. el fondo del argumento vale tanto entonces como ahora.

Ser mas de izquierdas que Gabilondo puede ser sencillo, pero, para echar  a la derechona del gobierno de Madrid no creo se necesiten mas izquierdistas.

Ser más de izquierdas que Felipe


Amar la política en tiempos de crisis. 1

Hace pocos días publiqué un post sobre Peces Barba. En los comentarios, mi compañero ideológico, Jesús de ‘BargasLa Sagra’, dejó una idea que despierta reflexiones, aunque no son totalmente nuevas, creo que se adecuan a la actualidad política que vivimos. 

Agradezco a quien provoca reflexionar, y lo tomo como excusa para transitar diversos caminos, así que no vean una respuesta directa, remover ideas es imprescindible, pero entiendan que la persona que ahora me incita a ello no tenga por qué mantener posición similar o contraria a las aquí publicadas, alguna de las cuales incluso tienen muchos años.

Decía Jesús: ‘’Yo soy de los que creen que Felipe González debió ser más de izquierdas; que Zapatero debió ser más de izquierdas. Lo mismo digo para el caso de Gregorio Peces-Barba. ’’ La aseveración anterior la suscribirían una inmensa mayoría de izquierdistas de todos los pelajes, a todos nos hubiera gustado. Francamente, no sería nada difícil encontrar personas más izquierdistas que Felipe, ZP, o Peces Barba; o que tantos otros políticos que pueblan los medios.

La cuestión debe ser enfocada de otra manera, ¿Qué presidente de gobierno de España más de izquierdas podríamos confrontar con Felipe?, o a Peces Barba ¿Qué constitución mas de izquierdas podemos confrontarle?, no que textos izquierdistas se podrían haber escrito más bonitos a finales de los 70, sino cuales podrían estar vigentes, aprobados? La cuestión no es citar a montones de personas más de izquierdas que seguro es bastante facil, la cuestión es, ¿quién de esos individuos podría haber sido miembro de gobierno, quien podría ganar y por consiguiente transformar a gran escala?  Y lleva aparejada otra pregunta, ¿si Felipe hubiera sido más de izquierdas habría sido reelegido varias veces?

Lo cual nos lleva a otra pregunta ¿por qué no fueron elegidos los que eran más de izquierdas? La respuesta podría ser; por incapacidad política, por no estar preparados para lo que las mayorías de electores querían, no fueron aceptados masivamente; no tuvieron suficientes apoyos, porque la gente que elegía no los quería como sus representantes; sus ideas no eran aceptadas, porque no tenían proyectos adecuados al momento y lugar de sus electores… estaban alejados de las necesidades e intereses de la gente, por tanto quizás la discusión abstracta respecto a la calidad de sus ideas pudiera situarlas a gran nivel teórico, pero su capacidad de transformación de la realidad era nula. En cuyo caso, no sé hasta dónde podría considerarse que fueran ‘más de izquierdas’, si tomáramos como baremo para medirlo las transformaciones reales realizadas en las vidas concretas de millones de personas.

El razonamiento puede ser llevado a otro nivel, sea alcalde, u otros; por ejemplo, más verdes que Cristina Narbona habrá montones, pero, ¿cuántos ministros del Medio Ambiente serán más verdes? Ojo, no cuantos podrían ser, ‘supuesto que hicieran tal y tal’, sino cuantos tuvieron la posibilidad real de ser ministro. La respuesta conduce a pensar que llegar no es cuestión de cualificación profesional, mérito o integridad ideológica, sino de capacidad política, que se demuestra en la lucha para sumar, para aglutinar fuerzas, para ser elegido en cada una de las instancias de partidos e instituciones en contraste con otras personas, la capacidad que deben mostrar es la de convencer y vencer. Lo cual nos llevaría a que supuestos mejores candidatos no fueran tales, salvo en ‘corrillos de mesa camilla’.

La argumentación anterior nos ofrece resultados por ejemplo en la actual modificación de la ‘Ley de costas’ votada durante un gobierno socialista en 1988, los cambios anunciados que introducirá el PP empeoran gravemente la situación anterior limitando derechos públicos ya existentes, deteriorando el medio ambiente para mayor beneficio de bolsillos privados, -parece claro que la defensa pública de la costa ha sido mayor la realizada por los socialistas, incluso teniendo en cuenta que en la legislación socialista anterior fuera en parte torpedeada la Sra. Narbona dentro de su propio partido-.

Es mentira que todos sean iguales.