La
cuestión de la lengua es uno de los ejes independentistas
El catalán
continúa siendo perseguido hoy en día.
El objetivo
final de los poderes españoles es hacer desaparecer el catalán o transformarlo
en una reliquia folklórica y residual.
Cercle
Catalá de Negocis. CCN.
¿De verdad estamos así como dice el
CCN? La lengua catalana fue motivo de polémicas desde antiguo, en el siglo XVI
las disputas tomaron la forma en torno a decidir, en qué habla realizar la
enseñanza religiosa, ganando el castellano la batalla de las predicaciones,
pero más importante aún ganó la batalla de los mercados, que no impone la monarquía,
se escogen por los catalanes en idioma castellano libros, folletos, normas, de
relaciones comerciales, culturales y políticas, porque permitían mayor
desarrollo de Catalunya. Este podría ser el caso en la actualidad, más
acentuado ya que siendo el castellano el segundo o tercer idioma del planeta,
parece que la defensa del catalán entendido como sustitutorio tiene la batalla
perdida porque perjudicará los intereses de los catalanes en un mundo
globalizado necesitado de relacionarse, para investigar, para trabajar e
influir comercial y políticamente, lo cual no evita defenderlo y mantenerlo
como complementario. Por supuesto contando con el pueblo propietario de la
lengua, los catalanes son el pueblo español que más valora su lengua materna
que sin duda está avanzando en estos años de democracia.
El
56 % de los catalanes tuvieron el castellano como lengua inicial, el 35 % en
catalán y el 7% otras lenguas.
La
capacidad de entender, hablar y escribir el catalán en los territorios de
lengua catalana ha mejorado de manera general en los últimos 23 años.
“Conocimientos
y usos del catalán en Cataluña en 2010: datos del Barómetro de la Comunicación
y la Cultura”. www.fundacc.org. 2011.
La
realidad es que el avance del catalán es arrollador, apoyado sin cortapisas, se
ha utilizado como una de las armas de esta contienda al pretenderlo prioritario
y vincular reivindicaciones históricas fuera de contexto con la realidad
actual, sin mirar los enormes cambios producidos desde hace tantísimos años.
Hoy es poco adecuado aferrarse al idioma para definir el carácter nacional
diferenciador, dado su carácter opresor
sobre un alto porcentaje de población castellanohablante, la más vulnerable de
la que construye actualmente Cataluña. Hasta no hace mucho, no existía conflicto
lingüístico, la sociedad catalana era bilingüe, aunque el idioma castellano era
el mayoritariamente utilizado por el pueblo que vive y trabaja en Catalunya,
según indican las encuestas (EULP 2008),
la Generalitat dice en su Encuesta de
Usos Lingüísticos de la Población de 2008, que la lengua inicial para los
mayores de 15 años fue el castellano, sobre el catalán en proporción 55% sobre 31.6%.
Si hubiéramos de mantener criterios decisorios de las mayorías, quizás poco de
la política lingüística catalana podría desarrollarse tal como se hace ahora,
porque si la mayoría decide según los criterios democráticos no habría por qué
dar prioridad a la minoría hasta el punto de que ésta ocupe el primer plano en
la dirección de todos los procesos culturales y políticos con tendencia a
aplastar al resto.
Resultats de l’Enquesta d’usos lingüístics a la població 2008
El 35,6% de la població adulta diu tenir el català com a llengua
habitual, el 45,9% manifesta que té el
castellà i el 12% declara tenir tant el català com el castellà com a llengües
habituals.
Generalitat de Catalunya.
Ayudas,
subvenciones y apoyos variados son prestados a la minoría, los debates
parlamentarios y gubernamentales están celebrados en el idioma minoritario, la
representación legal, administrativa y política y una gran parte de la
cultural, están dominados por el idioma minoritario. Las élites de poder en
Catalunya son monolingües, muestra de su alejamiento del pueblo al que dicen
representar, han sido extremadamente selectivas, nacionalistas en su gran
mayoría, y briznas de independentismo, que durante muchos años los catalanes
decidieron que fuera minoritario y es ahora cuando las encuestas lo dan como mayoritario.
¿Pueden imaginar cómo sería la relación en el nuevo estado si la situación hoy es así? ¿Están dispuestos a aceptar en
igualdad a los otros, o son excluyentes tal como hoy se presentan, o lo serán
más?
Seguro que lo anterior encontraría
explicaciones, pero ninguna justifica que esta política sea selectiva y
discriminatoria con las mayorías que tienen otro idioma. Este parapeto del que
se dotan las élites catalanas es difícilmente salvable para la integración de
los emigrantes de primera y segunda generación en los puestos relevantes de
poder, decisión y representación de la sociedad catalana. Es cierto que una
lengua hay que mantenerla, cuidarla, amarla y probablemente practicar
discriminación positiva, pero hasta un punto, o ¿acaso fiscalmente hay que
poner límites a la solidaridad como piden, y a las políticas de discriminación
no? ¿En el seno de Catalunya hay una sola sociedad, o varias?, o una sociedad
compuesta de múltiples personas e intereses muchos de ellos contrapuestos, pero
cuyas leyes actuales permiten y garantizan la vida en común de todos en
igualdad de derechos.
“Estos niños y niñas sacrificados bajo el
durísimo yugo de la inmersión lingüística en catalán sacan las mismas notas de
castellano que los niños y niñas de Salamanca, de Valladolid, de Burgos y de
Soria”.
Artur Mas, en el Parlamento autonómico (28 de septiembre de 2011)
Artur Mas, en el Parlamento autonómico (28 de septiembre de 2011)
“[El sistema
de inmersión] permite alcanzar niveles satisfactorios en el conocimiento tanto
del catalán como del castellano”.
Fundació Escola Cristiana de Catalunya (2 de septiembre de 2011).
Fundació Escola Cristiana de Catalunya (2 de septiembre de 2011).
No
es cierto que los datos PISA ofrezcan
buenos resultados de comprensión del
castellano en Catalunya, sus conclusiones se han demostrado manipulables, según
la intervención del responsable de los informes PISA 2003, 2006 y 2009, Joaquim
Prats, ex
presidente del Consejo Superior de Evaluación del Sistema Educativo de la
Generalidad, declara que se hacían en catalán y no en castellano. En
la población escolar ya es notoria una falta de comprensión de la lengua
mayoritaria. La pregunta es, en caso de segregación, ¿habría bilingüismo? ahora
ya falta en muchas partes, ¿o sería perseguida abiertamente y sin tapujos la de
uso mayoritario?
La
Constitución de la II República, de 1931, decía en relación al idioma:
Se puede aceptar que la actual
situación rebasa aquella en beneficio del catalanismo. La reivindicación de
instituciones catalanas del pasado olvidando las que funcionan en la
actualidad, ¿qué significado tiene hoy? Amparándose en un pasado glorioso, de
ningún modo superior al resto de territorios, ni al suyo actual, ¿les llevaría
a poner en marcha además de los fueros, la Corona de Aragón, sus reinos, reyes
y la nobleza, el vasallaje, la remensa,
o reivindican los Países Catalanes sin Aragón de los que se sienten cabeza, con
un cierto tufo pan-catalanista…? Me van a permitir que considere más avanzada y
progresista la Constitución española, muy superior a los derechos de siglos
pasados y con superior legitimidad que le da el refrendo popular muy superior a
los conocidos en el pasado. Constitución comparable en derechos ciudadanos a
cualquier otro estado democrático, mejorable sin duda, como cualquiera de las
otras.
"La lengua catalana
será la única que, con carácter oficial, podrá usarse en Cataluña y en las relaciones
de esta región con el poder central. Enric Prat de la Riba. Bases de Manresa,
1892. Base 3ª.-
Estatuto de Catalunya
de 1932
Art. 2. º El idioma catalán es, como el
castellano, lengua oficial en Cataluña. Para las relaciones oficiales de
Cataluña con el resto de España, así como para la comunicación de las
autoridades del Estado con las de Cataluña, la lengua oficial será el
castellano.
Toda disposición o resolución oficial
dictada dentro de Cataluña deberá ser publicada en ambos idiomas. La notificación
se hará también en la misma forma, caso de solicitarlo parte interesada.
Dentro del territorio catalán, los
ciudadanos, cualquiera que sea su lengua materna, tendrán derecho a elegir el
idioma oficial que prefieran en sus relaciones con los Tribunales, autoridades
y funcionarios de todas clases, tanto de la Generalidad como de la República.
A todo escrito o documento judicial que se
presente ante los Tribunales de Justicia redactado en lengua catalana, deberá
acompañarse su correspondiente traducción castellana, si así lo solicita alguna
de las partes.
Los documentos públicos autorizados por
los fedatarios en Cataluña podrán redactarse indistintamente en castellano o en
catalán, y obligadamente en una u otra lengua, a petición de parte interesada.
En todos los casos, los respectivos fedatarios públicos expedirán en castellano
las copias que hubieren de surtir efecto fuera del territorio catalán.
En 1932, el Estatuto de Cataluña abandona
los criterios de las Bases de Manresa, es de suponer que por considerarlas
desfasadas. Resulta interesante comprobar lo que decía aquel Estatuto,
considerado modelo reivindicativo del catalanismo en el tardo franquismo, y
compararlo con la realidad actual catalana, que lo supera, quizás podría
resituar a mucha gente en la reivindicación de independencia.
Estatuto 1979. Artículo 3
- La
lengua propia de Cataluña es el catalán.
- El
idioma catalán es el oficial en Cataluña, así como también lo es el
castellano, oficial en todo el Estado español.
- La
Generalitat garantizará el uso normal y oficial de ambos idiomas, adoptará
las medidas necesarias para asegurar su conocimiento y creará las
condiciones que permitan alcanzar su igualdad plena en lo que se refiere a
los derechos y deberes de los ciudadanos de Cataluña.
La configuración federal del estado
español, junto con la cesión de soberanía a Europa dificulta al gobierno
central ejercer un poder de forma dictatorial, resulta difícil gobernar en todo
el territorio sin pactos con otros gobiernos de las autonomías y el resto de fuerzas
políticas nacionales. El poder político en España, comparado con cualquier otra
época histórica está muy poco centralizado, que es lo mismo que decir que
existen otras grandes parcelas de poder en las llamadas naciones periféricas,
realidad bastante alejada de la idea de dominio o colonia. -Mientras tanto se
está produciendo una enorme concentración del poder económico-. Si el encaje
autonómico y el europeo, con la cesión de soberanía que comporta, no ha
impedido nuestra historia común de particularidades, no debería ser tan difícil
seguir viviendo juntos Cataluña y España, facilitado si no exageramos las
diferencias que siempre existen en cuerpos distintos y a partir de aquí parece
que el tratamiento legal de la lengua era asumido, aceptado, aprobado, y se
suponía querido por las mayorías. La pregunta entonces surge inmediata ¿hemos
retrocedido respecto a derechos lingüísticos? ¿La situación actual de la lengua
catalana explica la petición de independencia? O ¿es que se pretende volver al
pasado con una única lengua?
Estatuto
2006. Artículo 6. La lengua propia y las lenguas oficiales.
1.
La lengua propia de Cataluña es el catalán. Como tal, el catalán es la lengua
de uso normal de las Administraciones públicas y de los medios de comunicación
públicos de Cataluña, y es también la lengua normalmente utilizada como
vehicular y de aprendizaje en la enseñanza.
2.
El catalán es la lengua oficial de Cataluña. También lo es el castellano, que
es la lengua oficial del Estado español. Todas las personas tienen derecho a
utilizar las dos lenguas oficiales y los ciudadanos de Cataluña el derecho y el
deber de conocerlas. Los poderes públicos de Cataluña deben establecer las
medidas necesarias para facilitar el ejercicio de estos derechos y el
cumplimiento de este deber. De acuerdo con lo dispuesto en el artículo 32, no
puede haber discriminación por el uso de una u otra lengua.
El problema de la lengua en este mundo
globalizado es que resulta difícil encerrarla en recinto –no es posible poner
puertas al campo- tanto en un caso como en otro. No es posible, ni conveniente,
poner trabas al desarrollo de cualquier lengua, el catalán es imposible de
restringir, algo aceptado masivamente, legal y culturalmente. Pero tampoco se
puede restringir el español, siendo como es, una de las dos o tres principales
lenguas del planeta parece absurdo que se desperdiciara el poder de
comunicación que ello representa y que traslada a otros ámbitos políticos y
económicos. Publicaciones culturales y científicas inundan el mundo, patentes, descripciones,
literatura, prensa, radio, televisión, cine, universidades y escuelas, en todos
los países del mundo dirigen sus opciones de comunicación a unos pocos idiomas,
entre ellos el español en claro ascenso. La influencia política y económica acrecienta
su ascenso en todos los continentes, la expansión en América es enorme,
imposible elegir un presidente de EEUU sin dedicar políticas específicas a los
hispanos, expansión en Asia, etc. muy por encima de francés y alemán y aún así
con problemas para considerarlo en la UE como lengua preferente en patentes y
traducciones generales en las que prima el inglés francés y alemán. No me puedo
creer que el soberanismo catalán pretenda situar el catalán como lengua
preferente en Europa y el mundo, contraponiéndolo al español.
¿Se imaginan ustedes que los descendientes de antiguos pobladores
peninsulares reclamaran la lengua y pertenencia del territorio y sus
instituciones? –No crean que ello está muy alejado de la reivindicación de
AlQaeda- ¿Podemos suponer que tienen derechos, íberos, celtas, cartagineses,
romanos, visigodos…? Los árabes estuvieron asentados en Cataluña, supongan que
reivindican por derechos históricos su lengua y territorio, ¿qué legitimidad
tendría hoy? Y ello recordando que los árabes, no siempre fueron los
mismos, estuvieron asentados en gran
parte de la Península 700 años, en diferentes oleadas, formas y pueblos,
estuvieron más años que los transcurridos desde entonces hasta hoy. Los árabes
que estuvieron en Barcelona, Lérida, Tortosa,… no fueron los mismos que los de
hoy, pero tampoco los catalanes de entonces son los de ahora. La quiebra o
validez de legitimidad es parecida y no crean que el tiempo transcurrido desde
1714 hasta hoy sea superior al que estuvieron los árabes allí. Somos producto
del mestizaje pasado y no de la diferenciación.
1715-Consulta del
Consejo de Castillas.
En las aulas no debe
haber ningún libro en catalán, donde tampoco se hablará ni escribirá en esta
lengua y donde la doctrina cristiana se enseñará y será aprendida en
castellano. CCN
Evolució en la llengua habitual. Universitat Oberta
de Catalunya. 2008.
Lo que pasa es que se sea catalán o de la Hurdes casi todo el mundo piensa que con los presupuestos políticos que dominan desde Mayo del 2010 la libertad, capacidad decisoria, la igualdad etc. va a ir a peor. Y así centenares de miles de jóvenes prueban "independizarse" de España en Inglaterra, Alemania, Chile o China si falta hace. ¿Que están equivocados en Catalunya por pretender separarse? Es posible. ¿Pero el camino que se sigue, en la realidad, en el resto del estado, conduce a otra respuesta mejor?
ResponderEliminarNo es un problema de equivocación o acierto. creo que hay varios problemas mezclados. estamos de acuerdo en que la situación actual propicia el alejamiento, el intento de mandar todo a la mierda a todo aquel que sufre y padece la crisis. Lo cual es aprovechado por el indepndentismo.
ResponderEliminarLo q está sobre la mesa es la secesión de Cataluña, que en medio de la crisis económica aprovecha la desafección... para dar mayor poder a los ricos y facilitar que evadan su contribución a la solidaridad interclasista, o interterritorial...
Es evidente que en la cuestión de la secesión influye poderosamente la crisis. Pero en este caso, ha sido reconducida por sus élites para apostar por el viejo asunto de la separación y quedarse al margen de sus responsabilidades en esta crisis monumental.
Se quedan al margen, salvados los culpables de esta crisis, entre otras, porque los movimientos anticrisis, los indignados, etc. han desviado sus fuerzas, o han sido dirigidos por los independentistas, las izquierdas han sido abducidas por el soberanismo que es quien domina y dirige politicamente Cataluña.