14 de Abril. Aquellas libertades de entonces
Si la sociedad española actual debiera mirar hacia algún momento de la historia para agradecer algo, debería hacerlo hacia La República. Aquella del 14 de abril es la gran hacedora de muchas parcelas constitucionales actuales y por ende de muchas parcelas de vida cotidiana de los españolitos de hoy.
En mi infancia juventud, la mirada se dirigía desde los libros prohibidos, y desde aquellos republicanos que quedaban, silenciosos en sus puestos de trabajo, y que contaban de vez en cuando anécdotas, hacia aquella experiencia decían que adelantada a su tiempo, porque fracasó, porque la hicieron fracasar. Los problemas que puso sobre la mesa tratando de resolverlos son algunos de los mismos que posteriormente fueron resueltos (provisionalmente, como siempre) en la sociedad actual.
Quizás el mejor homenaje que pueda hacerse sea considerar que las libertades de hoy, más profundas y amplias que las de entonces, bebieron allí parte de su jarabe. A pesar de lo anterior, en algunos ambientes es más querida la República que la actualidad, por algunas razones, entre las cuales estará la épica y aquello del tiempo pasado fue mejor, el no haberlo vivido, el desconocimiento de hasta donde llegaron en libertades y condiciones materiales de vida y hasta donde llegamos hoy, incluso la idea de distinción, de distinguirse de los demás. Es indudable que la forma de lograrla con la participación popular e intelectual, en el momento en que se hizo, con la revoluciones en el horizonte, es el gran pasaporte para la eternidad, a lo cual contribuyó su asesinato.
Pero yo insisto en que el mejor homenaje sería decir a hombres y mujeres del pasado, mirar lo que hicimos con vuestros sueños y empujes, los llevamos un poco más lejos para más gentes: más amor libre, mas libertad de la mujer, mayor libertad para los diferentes por edad, extracción social, religión, raza, procedencia, clase… menos analfabetismo, mayor calidad de vida, mayor esperanza de vida…
Lo que no pudimos traernos fueron sus legiones de intelectuales y obreros comprometidos con su tiempo, no pudimos traer tanto esfuerzo investigador del que todavía no nos recuperamos, pero sí los ideales y espero que enseñanzas y experiencias de aquella época tan convulsa.
Si ya sé que a cambio nos trajeron gentes, ideas, organizaciones religiosas, que mejor se hubieran quedado allí. Saben ustedes que el saludo fascista brazo en alto está prohibido en Italia y es delito, causa de detención, y que las calles alemanas no tienen ningún nombre nazi, que allí están prohibidos los partidos nazis.
Lo que menos me gusta, las fosas que continúan sin abrir, esos muertos en los caminos que impiden o no facilitan recobrar. Qué españoles más burros continúa habiendo. El auto de Garzón porque es un símbolo de lo mucho que llegó hasta aquí que podría haberse quedado por el camino. Y me gusta muy poco que no se estudie en las escuelas aquellas gestas por conseguir mayor libertad, justicia y solidaridad de las que debería estar orgulloso todo un país.
viva la republica!!!!
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