Naturalmente
hay razones para echar a muchos políticos, a coger espárragos, a los juzgados, -lentos,
lentísimos-, incluso meter en la cárcel a unos cuantos. Siempre habrá ocasión y
argumentos para ello, en cualquier sociedad, en cualquier época. Lo que ocurre
hoy es que uno empieza a mosquearse de tantas cosas como se difunden, entre las
cuales hay verdades como puños y mierda
franquista, demasiados e-mail enviados a listas de correos, con
informaciones exageradas, falsas, que se amplifican plagadas de buenas
intenciones por las redes sociales, sin contrastar…
Para ocultar culpables
de la crisis, no
descarten que los grandes poderes económicos estuvieran tras la explosión y
difusión de ‘chismes antipolíticos’, por
supuesto muchos de ellos verdaderos; la mejor coartada siempre debe contener bastante
de verdad para ser creíble. Resulta raro, tanto y tan ampliamente difundido por
tantos medios, de todos los colores políticos e ideológicos, con tantos
intereses contrapuestos, todos contra el sistema, contra las instituciones,
contra todo, como si plantearan la necesidad de un salvador.
Las
oleadas del CIS, mantienen en los últimos lugares de confianza, a los
políticos, a los partidos, a los sindicatos… Pero entonces ¿en manos de quien
vamos a quedar, si echamos a todos?… No
se preocupen, es mentira, nunca se expulsa a todos, quedan los poderes ideológicos,
iglesias y demás zarandajas, y los poderes económicos, los individuos y
corporaciones que se ocultan, los que no salen en los casos de evasión,
corrupción etc. Ellos seguirán haciendo su trabajo y organizando la sociedad a
su antojo.
Los
corruptos, como Bárcenas, que se hicieron ricos y llevaron su dinero a Suiza, deben
ir a la cárcel, pero lo importante del asunto es que algunos dirigentes
políticos pusieron la mano para cobrar sobornos–sobresueldos en negro lo llaman- pero realmente lo sucedido es que fueron sobornados para actuar
a favor de los que pagaban, que eran grandes empresarios. Si alguien se lleva
pasta, es porque hay quien la entrega para obtener un beneficio aprovechándose
del contacto. De repente, porque unos cuantos se vean afectados, no hay que enmierdar todo. Hay que conseguir hacérselo
pagar al culpable y no diluir las responsabilidades entre todo su partido, ni
extendiendo los nombres de los líderes del resto de partidos y sindicatos, ni difundiendo
tropelías de familiares, ni supuestos robos o fortunas...
No todos son iguales. Esta consigna además de
profundamente mentira, es insensata, errónea y populista. Además de mostrar la
vaguería intelectual de muchos de los que la difunden, y de ser interesada,
para aprovecharse del resultado, sean rojos o azules. Esta consigna, perjudica
más a las izquierdas que a los azules, que saben lo importante que son los poderes de cualquier nivel para bascular la
sociedad a su favor. Las bases sociales de las izquierdas con el ‘todos son iguales’ ‘PSOEPP la misma mierda
es’, no marcharán a la revolución, al contrario se desmovilizan. Esa consigna está haciendo parte del trabajo sucio
al fascismo, creando el caldo de cultivo para un salvador.
Difundir
la comparación del asesino Franco,
con Rajoy, Rubalcaba o Rosa Díez, solo favorece al fascismo, y maldita la
gracia que tiene. Franco tuvo las manos y todo su cuerpo manchado de sangre,
fue el español que más españoles mató, o mandó matar, de la historia; la
dictadura no es comparable en muertes, miseria, opresión, represión,… absolutamente
nada que ver con la situación actual.
No hay comentarios:
Publicar un comentario